Este pasado sábado, asistí en compañía de los diputados autonómicos Jean Castel, Héctor Amelló, Alfonso Sánchez y María Francisca Valle al homenaje del que fué el único miembro de los Mossos d'Esquadra asesinado a manos de la banda terrorista ETA. Santos Santamaría fue asesinado en el año 2001 mientras estaba de servicio. Los terroristas cargaron cincuenta kilos de explosivo con metralla en un Ford Escort situado frente al Hotel Montecarlo de Gerona. Los propios etarras avisaron al diario ‘Gara’ de su acción e inmediatamente se desplegó un dispositivo de evacuación. El artefacto estalló durante el operativo, veinte minutos antes de lo informado, llevándose la vida del policía catalán a sus 32 años.
El acto tuvo lugar en el monolito dedicado a la memoria del agente, donde se hizo entrega de una ofrenda floral en su memoria. Como portavoz de Ciutadans Gavà y presidente del Grupo de Ciutadans en la Diputación de Barcelona, era una obligación política asistir, pero sobretodo, también una obligación personal, en memoria del que fue el único miembro del cuerpo de Polícia de Cataluña asesinado por ETA.
Lamentablemente algunos independentistas y miembros de Vox, quisieron hacer uso del acto, acudiendo con símbolos partidistas. Un hecho que no deja de ser lamentable; la utilización de un homenaje a una víctima terrorista por parte de estos partidos que quieren sacar rédito electoral a toda costa.
